Audemars Piguet ha desnudado varias veces al Royal Oak dejándolo sólo en lo esencial, pero no en la medida de 41 mm. El nuevo calibre 3132 aloja en su interior un doble órgano regulador, visible entre las 7 y las 8, que al ser esqueletado se puede disfrutar por ambos lados. No es la primera vez que se ve dos espirales en relojes de la manufactura, pero sí es la primera en que vienen junto con su volante, ambos sujetos sobre el mismo piñón. Y para que se puedan localizar fácilmente AP los ha sujetado con un puente de oro que destaca por sobre la esfera.