Ferrari KC23

Diseñado por el Ferrari Styling Center dirigido por Flavio Manzoni, el KC23 se basa en la plataforma 488 GT3 Evo 2020 de la que hereda su diseño, chasis y motor. La base para el proyecto fue muy especial: el 488 GT3 ha estado compitiendo desde 2016 y, hasta la fecha, ha triunfado en las carreras de resistencia más prestigiosas del mundo, acumulando más de 530 victorias y ganando más de 119 campeonatos, lo que lo convierte en el Ferrari de carreras más exitoso de la historia.

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Dada la naturaleza extrema de su configuración de motor, chasis y suspensión, el KC23 fue diseñado exclusivamente para uso en pista no competitivo. Su característica más inusual es su configuración dual. Cuando está parado, el diseño del automóvil muestra sus formas limpias, elegantes y sinuosas, pero una vez que llega a la pista, su postura visual está dominada por sus impresionantes tomas de aire, que se abren automáticamente, y su imponente alerón trasero.

Desde los primeros días del proyecto y de acuerdo con el cliente, el Ferrari Styling Center se centró en crear un automóvil único y radical completamente libre de restricciones de homologación y vestido con el tipo de líneas atemporales que lo convertirían en un clásico instantáneo y, al mismo tiempo, brindarían una tentadora visión del futuro de los superdeportivos. Ese objetivo desafiante exigió que se rediseñara cada una de las líneas del 488 GT3 Evo 2020, incluidas las superficies de vidrio y los grupos de luces.

El resultado es que el coche tiene una belleza monolítica, como si estuviera esculpido a partir de un solo bloque de metal. El diseño también oculta varias de las funciones técnicas del automóvil, en particular las tomas de aire laterales, que se abren automáticamente cuando se enciende el V8 biturbo central trasero. Esto le da al KC23 un aspecto casi real, ya que su forma cambia según el uso que se le dé. El alerón trasero también se puede quitar para resaltar sus líneas limpias y formales cuando no está en la pista.

El tratamiento de la superficie es suave y uniforme, con ángulos agudos reducidos a un mínimo absoluto para subrayar la pureza sinuosa y sobria del KC23 en la búsqueda de un diseño icónico y futurista que resistirá el paso del tiempo. Cuando el conductor enciende el motor antes de salir a la pista, el KC23 sufre una transformación radical, su postura de carrera y su agresividad de repente pasan a primer plano. Es imposible ignorar su imponente alerón trasero, que lo caracteriza como un auto de carreras diseñado para deslizarse por las curvas y liberar cada uno de los caballos de fuerza que puede generar el V8.

En términos de carga aerodinámica y refrigeración, los diseñadores trabajaron duro para conservar el rendimiento del coche donante a pesar de que el KC23 tiene una silueta completamente diferente. Los paneles se desarrollaron con cinemática personalizada que se activa automáticamente cuando se enciende el motor: el que está detrás de la rueda delantera revela una valla, que aumenta la carga aerodinámica delantera para equilibrar el automóvil aerodinámicamente. El panel en la parte trasera proporciona la cantidad correcta de aire de admisión a los intercoolers y componentes auxiliares, así como al motor.

Las puertas de mariposa del KC23 se abren verticalmente con bisagras delanteras simples, una solución arquitectónica que comparte con otro superdeportivo icónico, el LaFerrari. No se requirieron cambios en el invernadero o en la estructura del automóvil para incorporar esta característica. El capó en forma de concha tiene un sistema de apertura simple: solo es necesario quitar dos pasadores para permitir que se inspeccione el frente y se realicen los trabajos de mantenimiento. Tanto los faros como las luces traseras han sido rediseñadas, con el cambio más radical en las luces traseras donde llamativas láminas de luz de metacrilato, inspiradas en el Ferrari Vision Gran Turismo, cobran vida deslumbrante cuando se enciende el motor.

Incluso las superficies de vidrio del automóvil se vieron influenciadas por la filosofía de diseño que subyace al KC23: se integran a la perfección con la carrocería, sin pilares, marcos o sellos visibles, creando un efecto de cúpula claramente derivado de la aeronáutica. Su acabado metálico se fusiona a la perfección para lograr la máxima continuidad de estilo, creando un resultado sorprendentemente futurista.

Otra característica distintiva es la librea Gold Mercury del KC23, cortesía de una pintura de aluminio de cuatro capas especialmente desarrollada. El metal líquido en la pintura le da un brillo asombrosamente luminoso a la luz del sol y el color en sí parece cambiar constantemente según el tipo y el ángulo de la luz que lo incide, dando un efecto extraordinariamente cautivador.

La cabina se ha mantenido lo más minimalista y similar posible al 488 GT3 Evo 2020, con la excepción de los paneles de las puertas y el acabado del tablero en el lado del pasajero. Los asientos específicos del KC23, tapizados en Alcantara® con logo electrosoldado, confieren al habitáculo una elegancia en perfecta sintonía con el exterior. La visibilidad hacia atrás está asegurada por un sistema de cámara de video que también tuvo un impacto beneficioso en la aerodinámica del automóvil, ya que los espejos retrovisores tradicionales podían quitarse y la línea de los flancos no se manchaba.

El automóvil tiene dos juegos de ruedas diseñadas específicamente: las ruedas de 18” permitirán que el KC23 deslumbre en los circuitos del mundo, mientras que las ruedas de 21” en la parte delantera y las ruedas de 22” en la parte trasera cautivarán al público cuando se muestra en su configuración estática.