Con la introducción del EQC, el primer SUV con propulsión eléctrica integral de Mercedes-Benz, damos un paso decisivo. La propulsión eléctrica es un factor de gran importancia para la movilidad del futuro. Por ese motivo, a lo largo de los próximos años vamos a invertir más de diez mil millones de euros en nuevos productos EQ, y más de mil millones en la producción de baterías.